¿Lionel Messi y Antoine Griezmann están peleados?

La prensa española puso la lupa en la relación entre Lionel Messi y Antoine Griezmann, ahora compañeros en Barcelona, y luego de las primeras prácticas en el club. 

El conocido programa de polémicas del fútbol español “El Chiringuito de Jugones” sacó al aire un informe en el que muestra la indiferencia entre ambos y cuenta el origen del supuesto conflicto.

El único contacto que tuvieron en un campo de juego desde la llegada del francés al equipo catalán se dio el domingo, durante el amistoso del combinado azulgrana ante Arsenal por la Copa Joan Gamper. 

La Pulga había regresado el sábado último de sus vacaciones y el mismo día del encuentro se reintegró al elenco culé. La imagen más esperada se dio cuando Griezmann fue reemplazado y fue a sentarse en el banco de suplentes, donde esperaba el astro argentino (no participó del partido). 

Allí, el futbolista galo saludó uno por uno a sus compañeros y cuando llegó el turno del rosarino notó que ni siquiera lo estaba observando. El delantero campeón del mundo se sentó a su lado y por los siguientes 15 minutos, que eran los que restaban para el final del amistoso, estuvieron sin siquiera mirarse.

Las diferencias habrían nacido el 14 de junio de 2018, cuando el francés tenía chances de llegar a Barcelona y comunicó en un documental que su intención era quedarse en Atlético de Madrid. 

Desde ese momento, los medios catalanes informaron en aquel entonces, el vestuario del equipo blaugrana no lo había tomado bien.

Inclusive, en una conferencia de prensa se le consultó a Lio por la posible incorporación y fue categórico: “No opino de Griezmann”.

Como si esto fuera poco, hubo una curiosa respuesta del galo en su presentación, cuando le preguntaron si la Pulga lo había llamado: “No recibí mensajes de Leo, pero sí de Luis (por Suárez)”.

El tiempo pasará y con el correr de los entrenamientos y los partidos, se sabrá qué hay de cierto en todo este show montado por la prensa madrileña. La cuestión es que Messi y Griezmann son dos de los mejores delanteros del mundo y ahora socios en ataque.