Berizzo se marca como objetivo en el Celta "ganar el próximo partido"

El nuevo entrenador del Celta, Eduardo Berizzo, se marca como objetivo "ganar el próximo partido", ya que, argumenta, en fútbol "es muy difícil" fijar metas a largo plazo, aunque en el fondo confía en igualar o incluso mejorar la temporada recién finalizada con su antecesor, Luis Enrique, a los mandos.

En su presentación como nuevo técnico celeste, el "Toto" Berizzo ha hecho hincapié en la importancia de definir y "ser fieles" a un estilo de juego, que ha avanzado que será de corte ofensivo, pues tarde o temprano llegarán las victorias y con ellas se irá perfilando el objetivo del curso.

Ha recalcado que ese planteamiento de "aspirar a lo máximo" en cada partido, sin pensar más allá del compromiso más inmediato, requiere de "gran ilusión y compromiso", y ha hecho hincapié en la importancia del bloque y en que, de inicio, todos los jugadores "parten de cero", tanto canteranos, como los cedidos y los fichajes.

En este punto ha avanzado que se analizará la incorporación de Jota Peleteiro, cedido esta temporada al Eibar, a cuyo ascenso ha contribuido decisivamente, como a los demás integrantes de la plantilla antes de limarla y reducirla a 20 jugadores de campo y tres porteros.

"A priori, todos parten con las mismas expectativas y posibilidades", ha abundado Berizzo, quien ha avanzado que el dibujo del Celta será un 4-3-3.

Sobre los fichajes, ha confirmado que serán cinco, siempre en función de las salidas, y ha reseñado que le gusta trabajar con la cantera.

Preguntado por Pablo Hernández, a quien entrenó en el O'Higgins chileno, ha dicho que la idea es cubrir la ausencia de Rafinha con un jugador de sus características, un "volante ofensivo típico, de gran envergadura, atlético, muy técnico, con mucho gol y llegada al área rival".

Admirador declarado de su compatriota Marcelo Bielsa, con quien compartió banquillo en la selección de Chile y del que aprendió "muchísimas cosas", Berizzo se ha definido como un técnico al que le gusta el fútbol ofensivo.

"Para ganar hay que atacar y para eso, hay que defenderse muy bien", ha aseverado el nuevo técnico celeste, quien ha insistido en la necesidad de que los jugadores estén "comprometidos" y piensen en el colectivo.

Berizzo ha calificado como "un desafío" su aterrizaje en el banquillo del Celta, club que ya conoce de su etapa de jugador celeste (2001-2005), y cuya oferta tardó en aceptar "entre tres y cuatro minutos".

En los días que lleva en Vigo desde que cerró su fichaje, Berizzo se ha percatado de que el Celta es un club "más joven, más fresco, con más vida", pero que al igual que en su etapa de jugador la afición está "muy ilusionada"; una de "las claves" del éxito de todo equipo, "que la gente se sienta orgullosa de lo que vea en campo".

El técnico argentino, que aún no ha hablado con Luis Enrique, aunque tiene previsto hacerlo, y que prefiere ver los entrenamientos "a ras de piso", ha concretado que la pretemporada del Celta, que incluirá entre seis y siete amistosos, se dividirá en tres etapas, que discurrirán entre Vigo, Marbella e Inglaterra.

El presidente del Celta, Carlos Mouriño, le ha dado a Berizzo la bienvenida a su "casa" y ha reseñado que el objetivo del club es "darle continuidad al proyecto" de los últimos años.

Para ello, ha abundado, "nada mejor" que confiar en alguien que como jugador "ha sentido los colores", que "sabe tratar a la juventud" y cuya filosofía de juego encaja "perfectamente" con la del club vigués.

El director deportivo del Celta, Miguel Torrecilla, ha definido a Berizzo como un entrenador ofensivo, que imprime "mucho carácter" a sus equipos, que trabaja mucho en la presión al rival y que acostumbra a trabajar con la cantera. EFE