Los dueños del Liverpool se ven con sus banqueros en el Alto Tribunal

La reunión con los representantes de su banco crediticio en el Alto Tribunal de Londres es una primera batalla en torno a la propiedad del club de la Premier League inglesa.

El director gerente del Liverpool FC, Christian Purslow, (d), sale del Alto Tribunal de Londres, Inglaterra. Foto: EFE
El director gerente del Liverpool FC, Christian Purslow, (d), sale del Alto Tribunal de Londres, Inglaterra. Foto: EFE

La reunión con los representantes de su banco crediticio en el Alto Tribunal de Londres es una primera batalla en torno a la propiedad del club de la Premier League inglesa.

Los dueños del Liverpool se ven este martes con los representantes de su banco crediticio en el Alto Tribunal de Londres en una primera batalla en torno a la propiedad del club de la Premier League inglesa.
 
La audiencia tiene lugar después de que el Royal Bank of Scotland, que concedió un préstamo de 200 millones de libras (230 millones de euros) a los dos dueños del club, los norteamericanos Tom Hicks y George Gillett, lograse que un juez bloquease el intento de ambos de deshacerse de dos miembros de su junta directiva.
 
La pasada semana, Hicks y Gillett intentaron la expulsión de la junta del director gerente, Christian Purslow, y el director comercial, Ian Ayre para impedir así la venta del club a New England Sports Ventures, entidad estadounidense propietaria a su vez del equipo de béisbol Boston Red Sox.
 
New England Sports Venture logró frustrar una oferta rival del hombre de negocios singapurés Peter Lim tras aceptar pagar 300 millones de libras (345 millones de euros) por el Liverpool, pero, según algunas informaciones Lim podría elevar ahora su oferta.
 
El juez del Alto Tribunal de Londres deberá decidir ahora si los copropietarios del club han violado su contrato con el Royal Bank of Scotland, según el cual únicamente el presidente del Liverpool, y no ellos, pueden introducir cambios en la junta directiva.
 
En otro juicio por separado que tendrá también lugar esta semana deberá determinarse si la junta directiva puede vender el club a New England Sports Ventures (NESV) sin el consentimiento expreso de sus dueños reales.
 
Esto último está más abierto a la interpretación del juez ya que lo que se trata de dirimir es si los 300 millones de libras ofrecidos por NESV es una cantidad "razonable".
 
Los actuales copropietarios, que compraron el club en febrero de 2007, por 218,9 millones de libras, dicen que el precio ofrecido no lo es.
 
Si Hicks y Gillett ganasen el juicio, el Royal Bank of Scotland tendría que obligar a Kop Holdings, la compañía matriz del club, a declararse en suspensión de pagos o forzar eventualmente su venta.