Alemania aplastó 5-1 a Escocia y saca chapa de candidato en la Eurocopa 2024
Con goles de Wirtz, Musiala, Havertz, Fullkrug y Can; Alemania derrotó 5-1 a Escocia en su debut en la Eurocopa 2024.
Con goles de Wirtz, Musiala, Havertz, Fullkrug y Can; Alemania derrotó 5-1 a Escocia en su debut en la Eurocopa 2024.
Al borde de la excelencia, con el arquitecto Toni Kroos al frente y con la electricidad de Jamal Musiala, Floriant Wirtz y Kai Havertz, Alemania presentó sus credenciales como candidata al título tras pasar el rodillo ante Escocia (5-1), ganadora en el duelo de aficiones y arrasada en su estreno en la Eurocopa por una selección cautivadora.
El combinado germano vivió noche perfecta en el Allianz Arena. Los hombres de Julian Nagelsmann andaban preocupados por la falta de calor de su público, completamente superado por la efusividad de la afición escocesa en las calles y cervecerías de Múnich. Hasta Julian Nagelsmann e Ilkay Gündogan tuvieron que hacer un llamamiento a su país para unirse en torno a un equipo con hambre de títulos después de una década sin meter trofeos en sus vitrinas.
Nagelsmann no ha tenido mucho tiempo para armar un bloque después de sustituir hace meses a Hansi Flick en el banquillo de Alemania. Algo fallaba en el conjunto germano, errático y con poca identidad. Una de las soluciones la encontró en una llamada telefónica a Toni Kroos. Convenció al ya exjugador del Real Madrid y todo cambió. La pausa que imprime el centrocampista alemán era clave. El problema es que sólo durará unos partidos más, los que tarde en Alemania en caer eliminada o, si tiene suerte, en ganar la Eurocopa el próximo 15 de julio.
Cada golpeo de Kroos es un lujo que se va perder en breve. El aficionado alemán así lo apreció y aplaudió cada toque de su particular cirujano, que por fin dio sentido al juego de su selección. Equilibró por completó a Alemania e hizo lo que quiso con los escoceses. Kroos exhibió todo su repertorio, lleno de pases en corto precisos y de balones en largo quirúrgicos. Y, Nagelsmann, consciente de ese virtud, ha sabido rodear a Kroos de jugadores perfectos para su juego. A su lado, Andrich, un correcaminos, aporta el músculo que no tiene Kroos; en las bandas, dos puñales jovencísimos: Wirtz y Musiala, con unos insultantes 21 años; de enganche el siempre efectivo Gündogan; y arriba, el mordisco de Havertz.
Con esos mimbres nada podía fallar y Alemania se puso manos a la obra desde el primer segundo. Presionó de forma asfixiante a los escoceses, incapaces de generar nada, con McTominay, McGee y Robertson completamente superados por la situación. Y Kroos, en modo ejecutor, inició la jugada del primer tanto con un cambio de juego milimétrico de banda a banda que recogió Kimmich. El lateral del Bayern puso la pelota en el borde del área, donde apareció Wirtz para batir a Gunn con un golpeo de primeras.
Era el minuto diez y Alemania ya estaba por delante. Las gaitas escocesas de la grada se silenciaron para siempre. Las gargantas germanas pidieron más sangre. Y otra vez Kroos, como no, se la concedió. Poco después, en el minuto 20, filtró un pase magnífico a Gündogan. El jugador del Barcelona cedió la pelota a Havertz y éste, a su vez, se la dio a Musiala, que finiquitó la acción fusilando a Gunn con un disparo desde dentro del área.
Alemania, con su segundo tanto, irradiaba una felicidad plena. Nada ni nadie podía frenar un estreno perfecto que aún no había terminado. Podía levantar el pie del acelerador o pisarlo más fuerte. Apostó por la segunda opción y obtuvo un tercer premio en forma de penalti que transformó Havertz: 3-0 y a la caseta con la expulsión de Porteous por su entrada temeraria sobre Gündogan. Todo estaba terminado. No había más que hablar. Los segundos 45 minutos eran un trámite. Si Alemania seguía con hambre, la goleada podía ser escandalosa. Si estaba saciada, tenía la opción de perdonar a su rival.
En el vestuario, Nagelsmann no ordenó contención y sus jugadores, algo más pausados, controlaron el resto del choque sin sobresaltos. Amasaron la pelota en la zona escocesa durante casi todo lo que quedaba de partido. Kroos se erigió como el director de todas y cada una de las acciones. Llevó el tempo del choque como le dio la gana y Alemania se acercó al cuarto con un disparo de Rüdiger que repelió Gunn y con un lanzamiento de Wirtz que rozó el larguero.
Mención especial para Musiala, un regateador nato de los que casi han desaparecido por completo. Por la banda izquierda desquició en la primera parte a Porteus y después a Ralston. Casi todas las jugadas gobernadas por Kroos terminaron con las acciones del jugador del Bayern y entre los dos cimentaron una victoria que redondearon Füllkrug y Emre Can en el último tramo y que coloreó Rüdiger con un tanto en propia meta para alegría escocesa, que montó una fiesta con el acierto del zaguero del Real Madrid.
Pero la historia era otra y al final el Allianz Arena terminó por rendirse a la evidencia y coreó un 'Toni, Toni' en cada falta o córner que sacaba su jugador. Luego fue ovacionado cuando fue sustituido por Emre Can. La pregunta sigue en el aire: ¿de verdad se va a retirar Kroos? Nunca antes jugó mejor. El fútbol, sin duda, llorará su perdida. Y mientras se despide por los estadios de su país, Alemania sonríe porque ya es una candidata oficial al título.
PREVIA
Alemania y Escocia darán el pistoletazo de salida a la Eurocopa con un duelo marcado por el inicio del final de la carrera de Toni Kroos, que disputará el primero de la serie de encuentros con los que cerrará una trayectoria intachable de 17 temporadas en las que emergió como uno de los mejores centrocampistas de las dos últimas décadas.
Kroos comenzará a decir adiós en la que un día fue su casa. El Allianz Arena del Bayern Múnich, club en el que se formó desde cadete y en el que debutó como profesional, será el escenario de la primera de sus despedidas. Como mínimo serán tres (también se enfrentará a Hungría y Suiza), pero sería un fracaso descomunal para Alemania acabar eliminada en la fase de grupos.
A partir de este viernes, en cuanto el árbitro Clément Turpin decrete el inicio del choque, cada balón que acaricie Toni Kroos será casi una última degustación para los amantes del buen fútbol, que a nivel de clubes despidieron hace casi dos semanas al mediocentro germano en la final de la Liga de Campeones que el Real Madrid ganó al Borussia Dortmund.
Kroos salió victorioso de ese primer asalto. Levantó su sexta Copa de Europa y junto a Nacho, Modric, Carvajal y Gento se convirtió en el único jugador de la historia en sumar esa cantidad de títulos. Ahora quiere añadir a sus vitrinas la Eurocopa, un trofeo que se le resiste, el único de una colección de vértigo que llega hasta las 33 victorias.
Tal vez, esa necesidad de ganar todo, junto a la llamada del seleccionador Julian Nagelsmann, provocó el regreso de Kroos a la ‘Mannschaft’ casi tres años después de anunciar que se retiraba de la selección alemana (exactamente, el 2 de julio de 2021). Su vuelta, es un alivio para la sala de máquinas de un equipo que desde que ganó el Mundial en Brasil 2014 sólo acumula decepciones.
Eliminado en la fase de grupos en Rusia 2018 y en Catar 2022, y fuera de juego en los octavos de final de la pasada Eurocopa, el combinado dirigido desde hace apenas nueve meses por Nagelsmann, sustituto de Hansi Flick, necesita dar un golpe encima de la mesa para instalarse de nuevo en lo más alto del planeta fútbol y brindar a Kroos una digna despedida.
Con el regreso de Kroos, Nagelsmann ha reseteado su centro del campo y ha introducido a Robert Andrich como peón necesario para equilibrar a su selección. El medio del Bayer Leverkusen, inédito en las convocatorias de Alemania hasta los 29 años, será el compañero perfecto para el ya ex jugador del Real Madrid. Uno pondrá la pluma y el otro la espada: calidad y músculo al servicio de Alemania.
Pero no sólo Kroos será el protagonista del equipo de Nagelsmann. Ilkay Gündogan como lanzador, Antonio Rüdiger atrás y los jóvenes y descarados extremos Jamal Musiala y Florian Wirtz, serán clave para un equipo que tiene dudas en la portería con Manuel Neuer, criticado por irregular estado de forma, y que contará con la baja de última hora de Aleksandar Pavlovic, sustituido por Emre Can por una amigdalitis.
¿Y Escocia? El combinado británico no quiere ser un simple invitado a la fiesta de Kroos en el Allianz Arena. Bajo las órdenes de Steve Clark desde 2019, ha conseguido una pequeña resurrección después de décadas inédito en los grandes torneos. Consiguió clasificarse para la pasada Eurocopa después de 22 años ausente de todas las fases finales y volvió a conseguir otro éxito tras lograr un billete para Alemania.
Escocia planteará peleará con sus armas: es un equipo físico, peligroso a balón parado y que vive del corazón de Scott McTominay y de la clase John McGinn. Andrew Robertson, tocado en un tobillo, y Paul Tierney, también aportan a un grupo que perdió a última hora Lyndon Dykes, su delantero referente que será sustituido por Ché Adams, un jugador que no es un atacante puro.
El objetivo de los hombres dirigidoS por Clark es claro: pasar por primera vez en su historia una fase de grupos. No lo consiguió en los Mundiales de Suiza 1954, Alemania 1974, Argentina 1978, España 1982, México 1986, Italia 1990, Francia 1998; tampoco en las Eurocopas de Suecia 1992, Inglaterra 1996 y Europa 2020. Es su asignatura pendiente y una sorpresa en el partido inaugural marcaría el camino para un grupo que sueña con hacer historia.
La probable formación de Alemania vs. Escocia, por Eurocopa 2024
Manuel Neuer; Joshua Kimmich, Rüdiger, Jonathan Tah, Mittelstädt; Andrich, Toni Kroos; Jamal Musiala, Ilkay Gündogan, Florian Wirtz; y Kai Havertz.
La probable formación de Escocia vs. Alemania, por Eurocopa 2024
Gunn; Ralston, Hendry, Hanley, Tierney, Robertson; McTominay, Gilmour; McGregor, McGinn y Adams.
Datos del partido entre Alemania y Escocia por la Eurocopa
- Hora: 16
- TV: ESPN
- Árbitro: Clément Turpin (FRA)
- VAR: Jérôme Brisard (FRA)
- Estadio: Allianz Arena, Múnich