Biglia quiere forzar su recuperación para poder jugar la Copa América

El centrocampista internacional argentino Lucas Biglia, del Anderlecht de Bruselas, está dispuesto a "asumir riesgos" en el proceso de recuperación de su lesión en el hombro y aplazar hasta finales de julio una posible operación, con el fin de poder disputar la Copa América con su selección.

Biglia se dislocó el hombro en una mala caída durante el partido de la fase final de la liga belga que enfrentó al Anderlecht con el Brujas el pasado domingo.

"El Principito" debe pasar todavía varias pruebas médicas para determinar el alcance exacto de la lesión -no se descarta que haya incluso una fractura o daños en los ligamentos- y si deberá pasar por el quirófano, pero lo que ya es seguro es que se perderá lo que queda de temporada con su equipo, según un comunicado del club bruselense.

Ante una más que posible operación, Biglia está dispuesto a aplazarla hasta verano para poder ir convocado con Argentina en la Copa América que se disputará en julio en su país.

A cambio de posponer la recuperación, que los médicos estiman de entre dos y tres meses, el centrocampista firmaría de antemano un nuevo contrato con el Anderlecht.

"Normalmente el Anderlecht está de acuerdo en que juegue la Copa América y me opere a finales de julio, con la condición de que firme un nuevo contrato", declaró el jugador, según el diario belga 'La Dernière Heure'.

"Hablaré con mi representante y veremos qué es mejor", añadió el futbolista, de 25 años y que ha debutado este año con la selección absoluta argentina.

Biglia aseguró que, para él, "la Copa América es muy importante", por lo que desea seguir el mismo proceso de recuperación que le permitió volver a los terrenos de juego en solamente un mes cuando se dislocó el hombro en agosto

Esa fue la tercera vez que el futbolista sufre una lesión de este tipo.

El médico del Anderlecht, José Huylebroeck, señaló al diario que "Lucas sabe que tiene que operarse. Si fuera un jugador de béisbol, un lanzador de jabalina, un tenista o un nadador no habría la menor discusión: pasaría por la mesa del quirófano inmediatamente".

Sin embargo, el especialista reconoció que un futbolista "puede jugar con un hombro debilitado. Pero el riesgo de agravar la lesión es real y existe el riesgo de que la operación posterior sea más complicada".