Calderón anuncia "cambios" en el partido ante los rusos

El entrenador del Real Betis, el argentino Gabriel Humberto Calderón, ha anunciado esta tarde que "mañana habrá cambios", con respecto a sus alineaciones de la Liga, en la ida de los dieciseisavos de final de la Liga Europa que su equipo disputa en el Benito Villamarín ante el Rubín Kazán ruso.

Para Calderón, la competición europea supone "una buena oportunidad para ver a jugadores que no están teniendo muchos minutos", ya que "durante la semana están buscándose un hueco" aunque estos "cambios son también para intentar ganar el partido" frente a un rival que "ha cambiado jugadores y de entrenador durante el invierno".

El preparador bético, en una rueda de prensa en el estadio previo al entrenamiento del equipo, ha indicado que ha "visto vídeos" del adversario europeo, al que calificó como "duro y muy bien organizado" aunque ha resaltado que "a estas alturas de la competición todos los equipos son peligrosos", especialmente el Rubín, que "casi siempre le gana a los equipos españoles. Ojalá esta eliminatoria sea una historia diferente", ha señalado.

Calderón ha recordado que el Betis ha "querido cambiar el escenario de la vuelta porque las instalaciones" del Rubín "no reunían lo que UEFA demanda" pero como "la petición no fue aceptada", el técnico ha "planificado para la semana que viene entrenamientos en campos de césped artificial para que los futbolistas puedan aclimatarse".

Sobre lo anunciado por un grupo de seguidores béticos, que han pedido que la afición no acuda al partido de mañana como protesta por la mala marcha del equipo en Liga, Calderón ha comentado que "cada uno puede hacer lo que quiera" pero ha precisado que cuando llegó "al Betis hace 31 años", aprendió que "el sentimiento de fidelidad a un equipo es reaccionar ante las malas situaciones".

"El aficionado siempre tiene razón. A la afición lo único que podemos es darle las gracias. Pero estar en Europa costó mucho en su momento, se luchó mucho por eso y ahora hay que demostrar qué es el Betis. Es una final más y tenemos que estar a la altura. Queremos darle una alegría a nuestra gente", ha relatado.

El central polaco Damien Perquis, ausente desde hace dos meses tras fracturarse la mandíbula y posteriormente al sufrir un cólico nefrítico, se ha mostrado "feliz por poder volver a jugar".

Perquis, que acudió a la sala de prensa del estadio bético junto al técnico de equipo, ha reconocido que "está siendo un año complicado", pero ha manifestado que tiene "ganas de demostrarle al 'míster'" que ya está "recuperado".